Los dos profes a la cabeza de las izquierdas madrileñas compiten por el mismo espacio y se enfrentan a una dama boba, con una ejecutoria gubernativa plagada de errores y extravagancias. Probablemente, los profes perderán el lance ante la dama. Don Gabilondo y don Iglesias son distintos y distantes, por talante, por edad, por visión del mundo.
La osamenta del estado
Propiedad y guardias de la porra, y nada de otras funciones adheridas al estado, como educación y sanidad públicas y demás gasto improductivo. Llegados a esta casilla, la oferta política trumpista es la más competitiva y ventajosa, y en dirimirlo va a consistir la inmediata batalla de Madrid.
La puñalada por la espalda
La frase que da título a esta entrada fue una consigna propagada por la extrema derecha alemana en los años veinte del pasado siglo para acusar al gobierno democrático de la derrota del país en la primera guerra mundial. Hoy y aquí la ‘puñalada por la espalda’ es el aeropuerto de Barajas, la única infraestructura de Madrid cuya gestión compete al gobierno central, social-comunista, y que doña Ayuso no cesa de señalar como el manadero del coronavirus.
La feria de invierno
Más cornás da el hambre, que dijo no sé quién y es la consigna fatalista con la que las autoridades están lidiando a ese enemigo mortal de necesidad que es el coronavirus.
Paraísos bajo asedio
Madrid es un paraíso fiscal cuyo fundamento no es económico sino político, debido a, 1) su condición de capital administrativa y política del estado; 2) un bajo gasto social decretado por sus autoridades y 3) una liviana fiscalidad para las rentas del capital. Estos factores combinados crean un poderoso aspirador del oxígeno económico del resto del país.